Alimentos humanos prohibidos para gatos
CUIDADO Y NUTRICIÓN
29 Nov, 2021
8 minutos
A diferencia de los perros, los gatos no tienen una reputación de devorarse pasteles de cumpleaños o almuerzos desatendidos. Podrías pensar que tu amigo felino no tiene apetito por la comida humana en absoluto y puede parecer descabellado imaginar a tu gato pidiendo una barra de chocolate o un sorbo de una bebida alcohólica. Pero también puede darte tentación de darle a tu gato un bocado de comida humana en ocasiones como premio, y antes de hacerlo, debes saber que, en algunos casos, incluso un bocado puede hacer que tu gato se enferme. Hay muchos alimentos humanos que son tóxicos para los gatos. Cualquier alimento no diseñado específicamente para gatos puede afectar el sistema digestivo, y puede causar molestias de estómago (como vómito y diarrea) o incluso signos peores.
Los siguientes son alimentos que debes mantener alejados de tu gatito.
1. LÁCTEOS.
No hay mucho más felino por excelencia que la imagen de un gatito lamiendo leche de un platillo, pero ¡en realidad la mayoría de los gatos son intolerantes a la lactosa! Debido a que los gatos no poseen cantidades significativas de lactasa – la enzima que descompone la lactosa en glucosa – cualquier producto a base de leche puede conducir a diarrea u otros trastornos digestivos.
2. CEBOLLAS Y AJOS.
Alimentos como cebollas, ajos contienen tiosulfato, un compuesto que puede causar serios problemas en tu gato. Si tu gato come lo suficiente, el tiosulfo causa la destrucción de los glóbulos rojos, una condición devastadora llamada anemia hemolítica. Por lo general, tu gato probablemente no buscará trozos de cebolla o ajo, pero podría tomar algunos bocados de tu cena que contienen cebolla, ajo o ambos. Y se los puedes dar inadvertidamente en pollo o caldos que quieras añadir a su comida. Mayormente, está bien darle a tu gato un poco de pollo o caldo, pero solo asegúrate de que no incluyan cebollas o ajo.
3. ALCOHOL.
Recuerda que los gatos son relativamente pequeños, por lo que pequeñas cantidades de alcohol pueden causar una serie de problemas si tu gato logra tomarse un trago. Estos problemas van desde trastornos digestivos hasta dificultad para respirar, desorientación, coma e incluso la muerte. Asegúrate de no dejar bebidas desatendidas encima de las mesas del comedor y la sala, o en cualquier lugar qué esté al alcance de tu amigo felino, y limpia cualquier derrame antes de que t gato tenga la oportunidad de probar un sorbo. Realmente no se necesita mucho más que un lengüetazo o dos de alcohol para causar problemas importantes en los gatos.
4. AGUACATE.
El aguacate es alto en grasa y puede causar trastornos digestivos y aumentar el riesgo de pancreatitis en los gatos. Además, las hojas, frutos y corteza de aguacates contienen persina, lo que puede causar serios problemas en su gato.
5. CHOCOLATE, CAFÉ Y ALGUNOS REFRESCOS.
Todos estos productos contienen metilxantinas (cafeína y sustancias relacionadas como la teobromina), que se encuentran naturalmente en las semillas de cacao, granos de café y en un extracto de nuez que se utiliza en algunos refrescos. En los gatos, las metilxantinas pueden causar vómitos, diarrea, jadeo, sed excesiva y micción, hiperactividad, ritmo cardíaco anormal, temblores, convulsiones e incluso la muerte. Si bien el chocolate amargo o negro es el más peligroso, todas las variedades de chocolate (amargo, leche y blanco) son peligrosas para tu gato.
6. COMIDA PARA PERROS.
Un bocado ocasional de comida para perros no dañará a tu gato, pero una dieta constante de comida para perros puede causar que tu gato esté gravemente desnutrido. Tu gato necesita comer alimentos que están especialmente formulados para sus necesidades, que incluyen taurina, un aminoácido esencial para los gatos, que se encuentra en la proteína animal. La taurina es esencial para un sistema inmunológico saludable, la visión, la función de los músculos cardíacos y la digestión en los gatos. La comida para perros no contiene suficiente taurina ni la concentración adecuada de proteína para los gatos.
7. UVAS Y PASAS.
Si bien la sustancia tóxica dentro de las uvas y las pasas es desconocida, la ingestión de estos alimentos por parte de tu gato puede conducir al desarrollo de insuficiencia renal. Los efectos pueden ser aún más pronunciados en animales ancianos y enfermos.
8. PAPAS Y TOMATILLOS, JITOMATES.
Las papas, tomatillo y tomates son miembros de la familia de las solanáceas. Las papas crudas (incluyendo sus pieles) y los jitomates verdes (sin madurar) también contienen solanina, un glicoalcaloide amargo y venenoso, que puede causar vómitos y diarrea. Las hojas y los tallos son particularmente tóxicos. La papa cocida, la batata y los jitomates maduros no contienen solanina. Los jitomates en los alimentos para gatos están maduros y no deberían causar preocupación porque generalmente se usan en cantidades relativamente pequeñas.
9. HÍGADO Y ACEITE DE HÍGADO DE BACALAO.
Comer demasiada carne de órganos, especialmente hígado de cualquier animal, o suplementos que contienen altos niveles de aceite de hígado de bacalao, puede causar toxicidad por vitamina A, una afección grave que puede dañar las articulaciones y los huesos de tu gato. Los señales incluyen rigidez e inmovilidad de las articulaciones, dolor e incomodidad e incluso puede haber huesos deformados y fracturas, así como signos gastrointestinales.
10. NUECES DE MACADAMIA.
Estos frutos secos se utilizan comúnmente en muchas galletas y caramelos y pueden causar problemas significativos para tu amigo felino. El letargo, los vómitos, el aumento de la temperatura corporal (hipertermia) y los temblores son los signos iniciales que pueden progresar a ataxia o paresia de las extremidades posteriores.
11. CARNE CRUDA/POCO COCIDA, HUEVOS Y HUESOS.
La carne cruda y los huevos crudos pueden contener bacterias como Salmonella y Escherichia coli (E.coli) que son dañinas para los gatos. Además, los huevos crudos contienen una enzima llamada avidina que disminuye la absorción de biotina (una vitamina B), lo que puede provocar problemas en la piel y el pelaje. Alimentar a tu mascota con huesos crudos puede parecer una opción natural y saludable, sin embargo, puede ser muy peligroso para tu gato. Él podría atragantarse con los huesos o sufrir una lesión grave si el hueso se escinde y se aloja en o perfora el tracto digestivo de tu gato.
12. SAL.
Grandes cantidades de sal pueden producir sed excesiva y micción, o incluso intoxicación por sodio en los gatos. Los signos de que tu gato puede haber comido demasiada sal incluyen vómitos, diarrea, depresión, temblores, temperatura corporal elevada, convulsiones e incluso la muerte.
13. XILITOL Y ALIMENTOS AZUCARADOS.
Utilizado como edulcorante en muchos productos, incluyendo goma de mascar, caramelos, productos horneados y pasta de dientes, el xilitol puede causar una liberación de insulina que hace que los niveles de azúcar en la sangre bajen y también puede causar vómitos, fatiga, pérdida de coordinación y, finalmente, insuficiencia hepática. Los signos incluyen vómitos, letargo o fatiga y pérdida de coordinación. Estas enfermedades progresan rápidamente (dentro de unos pocos días) a la insuficiencia hepática. Los alimentos azucarados tampoco son buenos para los gatos y pueden conducir a problemas dentales, obesidad y diabetes.
14. CÍTRICOS.
Los tallos, hojas, cáscaras, frutos y semillas de plantas cítricas contienen cantidades variables de ácido cítrico, aceites esenciales que pueden causar irritación y posiblemente afectar el sistema nervioso central de tu gatito, si se ingieren en cantidades significativas. No es probable que las dosis pequeñas presenten problemas significativos más allá de un malestar estomacal menor.
15. LEVADURA
La levadura en la masa puede expandirse y producir gas en el tracto digestivo llevando al dolor debido a la distensión del estómago y los intestinos, y estos pueden hasta sufrir una posible ruptura. Además, a medida que la masa se expande, se produce alcohol que puede ser tóxico para tu gato.
16. ARTÍCULOS NO ALIMENTARIOS
Los medicamentos también representan un riesgo para los gatos si se ingieren. Una serie de medicamentos comunes de venta libre (incluyendo aspirina, paracetamol e ibuprofeno) son peligrosos para los gatos. No los mediques, siempre sigue las instrucciones del Médico Veterinario.
Si sospechas que tu gato ha comido algo que pueda ser peligroso o venenoso, trata de determinar lo que puede haber ingerido y cuánto. En algunos casos, pequeñas cantidades pueden no causar un problema significativo, pero cantidades más grandes pueden requerir tratamiento inmediato. Siempre es mejor consultar al Médico Veterinario para obtener asesoramiento.